COMENTARIO SOBRE EL TRABAJO DE INFERIORIDAD Y POWER PLAY

Rusia, en inferioridad numérica, realiza muy bien el posicionamiento 1-1-2 como básico y lo combina con el 1-2-1 en ¼ de pista. Muy ordenados y con gran intensidad y concentración, buscando siempre triangular sus posicionamientos (más líneas más seguridad) en relación al juego que estaba realizando España, consiguiendo elevar a los jugadores atacantes el stress que de por sí la situación lo exigía, provocando errores que pudieron ser definitivos (robos de balón) , obligando a los técnicos hispanos a sacar el quinto jugador (Power Play) que asegurara la circulación del balón y abriera líneas de pase para la finalización. Ese stress también llegó en los fallos incomprensibles de cara al gol. No obstante, el ataque español era demasiado estático con muy poca circulación de jugadores y cuando lo hizo con Torras, generó una ocasión que no supo materializar.
En el 5×4 vemos algo de más movilidad en el equipo español y cuando eso ocurre se genera peligro, pero la gran defensa rusa sólo es abatida porque una jugada desafortunada despista a su portero (gran actuación) y Sergio Lozano consigue el empate para el combinado español.